Un concepto de familia manifiesta que ella es la cedula de nuestra sociedad. Una sociedad se basa en la buena y adecuada organización de la familia por cuanto ella debe ser la difusora principal de los principios fundamentales de cualquier sociedad: honor, moral, trabajo, espiritualidad, y también ser la primera escuela de letras para nuestros hijos.
La influencia de la familia en el proceso formativo del niño y la niña es determinante. Estudios demuestran marcadas diferencias de capacidad de aprendizaje de niños provenientes de familias que practican la actividad de la lectura.
Así padre o madres que acostumbren a leer en voz alta a sus hijos, a leer cuentos, no solo estarán estimulando la imaginación, la creatividad del niño sino que los estaría introduciendo al fascinante mundo de la lectura y por ende a que le sea más fácil adquirir la destreza de escribir en un ambiente donde domine la cultura, la letra impresa y la lectura son un proceso que se inicia a la par con la adquisición de la lengua materna.
Es la etapa donde el niño tiene contacto con los materiales escritos y adultos mediadores. Es una etapa donde se propicia la interacción dados en el hogar, donde tantos pedrés como hijos son protagonista de la transmisión del lenguaje escrito. Se estaría dando pasos hacia la alfabetización que parte de la familia que tiene lugar en el seno de la práctica social de la lengua escrita.
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